El experto en marketing y director académico del magister de la UAI en esa especialidad repasa los desafíos que atraviesan el marketing y la publicidad y subraya la necesidad de crear contenidos que pongan a los clientes nuevamente al centro. Además, enfatiza que la única manera de entregar valor en un contexto de crisis es a través de acciones concretas. “La gente quiere, en vez de que le digas ‘pobrecito, no puede compra las cosas’, que le digas qué vas a hacer para ayudar ayudarlo”, sentencia.
La industria del marketing está en constante cambio. Tanto, que el docente y director académico del Magíster en Dirección de Marketing UAI, Bracey Wilson, asegura que hoy “ni siquiera hablaría de marketing, sino que hablaría más de sociología y psicología”. Los nuevos contextos sociales, económicos y culturales han remecido los cimientos de la publicidad y lo que era válido hace unas cuántas décadas atrás, hoy ya no lo es. Así lo afirma Wilson, quien plantea que hoy impera la necesidad de volver a poner al cliente en el centro, pero entregándole un valor superior. “Uno lo que enseña es que las marcas deben tratar de buscar fidelización, para que sigan contigo en lo que tu quieras. Hoy el diagnóstico es que la gente siente que las marcas ya no están siendo necesarias, no porque no sean importantes, sino porque no se les está entregando valor”, recalca.
En esta nueva sesión de Marcas con Contenido, el director académico UAI analiza con profundidad el escenario en el que está hoy el marketing y la publicidad, entremedio de cambios sociales que hacen más desafiante la labor de comunicación para las marcas. De hecho, una de sus acotaciones es volver a la base del rubro: poner al cliente al centro, saber cuál es su dolor y preguntarle qué es lo que hoy le importa. Por lo mismo, asegura que luego de un escenario de pandemia, de crisis económica, de guerra y otros desafíos tanto locales como globales, las pymes han tomado ventaja en cuanto a su comunicación y relación con los clientes. “Estuvieron más en contacto directo con nosotros, volvimos a comprarle a alguien que nos conoce, que nos llama por su nombre; no como una multitienda en la que terminamos siendo un número”, explica.
Por lo mismo, afirma que la única manera de resolver el desafío que tiene el marketing en un contexto de crisis, es a través de acciones concretas. “Con la inflación que estamos viendo, no solo acá sino global, hay un tema de brand switch. Sé que les va a parecer loco, pero es muy bueno que nos estemos enfrentando a una inflación después de la pandemia. ¿Por qué? Cuando estuvimos encerrados nos obligaron a cambiar de hábito, no te comprabas tanta ropa porque andabas la mitad del día en pijama y la otra con ropa para un Zoom, no comprabas cosas porque no salías”, contextualiza. Y sigue: “La gente entendió que puede vivir con menos, ahora con la inflación tienes que pensar en cómo hacer la sustitución. La gente hoy está buscando el tema del precio directamente, incluso más que las marcas. El retail ha sido inteligente desarrollando marcas propias, porque están haciendo marcas con valor”.
¿El desafío para las marcas en ese contexto? “La gente no quiere más avisos, quiere acciones. En vez de que tu le digas ‘ay, pobrecito, no puede comprar las cosas, quiere que le digas qué vas a hacer para ayudarlo en lo que está viviendo”, afirma Bracey Wilson en el podcast Marcas con Contenido y argumenta su postura: “Ahora que se terminó el mes del Pride, yo soy súper crítico, porque uno tiene que mostrar acciones. Me parece fuera de lugar que aparece una marca que vende televisores y pone la bandera del Pride y luego los ves actuando, escuchas sus comentarios… Por eso la comunidad LGBTIQ+ no quiere la banderita, quiere acciones. Daniela Vega le dijo al Metro, que lindas las luces pero ¿hay gente de la comunidad contratada? Eso busca la gente y más esta generación. Saber qué estas haciendo”.